Algunos medicamentos aumentan
un 43% el riesgo de morir por ataques cardíacos y derrames cerebrales. Por
si fuera poco, estos medicamentos incapaces de curar, también deterioran los
órganos internos de los pacientes.
Ese es un RIESGO que casi todos los diabéticos toman (algunos sin saberlo) con tal
de regular sus niveles de azúcar.
Y como era de esperarse…
desarrollé problemas cardiacos serios.
Un día, eran como a las
2 de la tarde y cuando recién llegaba a casa, sentí un fuerte dolor en el
pecho, empecé a sudar frio, solo sentí que no podía respirar y caí al suelo
inconsciente.
...sufrí un paro
cardíaco, que según el médico, de no haber sido por la rapidez con la que actuó
mí esposa hubiera muerto.
Cuando desperté en el
hospital, me di cuenta que a mi lado estaba mi esposa llorando
inconsolablemente, esa situación me recordó a mi padre...
¿Acaso era mi destino
morir por culpa de la diabetes? ¿Qué pasaría con mis 3 hijos y mi esposa si un
día les llegará a faltar?
Cerré los ojos para
evitar que las lágrimas de tristeza se deslizaran por mis mejillas y,
temblando, apreté la mano de mi esposa y dije lo mejor que se me ocurrió en el
momento: “tranquila amor, no voy a morir, te lo prometo”
Con Esta Promesa y
Después de Haber Devuelto el “Boleto de Muerte”, Mi Vida Tuvo Un Giro Radical
Empecé a investigar todo
lo que podía sobre la diabetes. Invertí en seminarios, conferencias y libros de
reconocidos expertos de la diabetes.
Tenía una meta y,
francamente un deseo ardiente de encontrar una solución a la enfermedad.
Mis colegas, amigos e
incluso extraños se rieron de mí por intentar encontrar una cura para la
diabetes, todos decían que solo se podía controlar con los medicamentos
(Dicho sea de paso, ya sabes que NO FUNCIONAN y que te provocan un problema
mayor)
La verdad es que el solo
hecho de pensar “esto” para mis colegas doctores es casi PROHIBIDO.
Analicé toda la teoría,
todos los estudios científicos acerca de cómo curar la diabetes, algunos eran
puras tonterías y otras me dejaban “boquiabierto” pensando en las razones por
la cual estas no eran conocidas en los círculos médicos.
Hasta que descubrí la cruda
verdad y...
El “Gran Soborno” a La
Comunidad Médica
La diabetes es
prácticamente una epidemia mundial, lo que significa billones y BILLONES DE
DÓLARES para la industria farmacéutica que se encargan de controlar todo
detrás del telón.
Se sabe de casos en que
los grandes productores de medicamentos han llegado a sobornar médicos,
falsificar datos y maquillar algunos informes, con tal de anteponer sus
ganancias antes que cualquier otra cosa – incluyendo tu vida y tu salud.
Las pruebas son claras,
son de conocimiento público y están a la luz del día.
Un ejemplo es lo que
publicó The New York Times, quien es uno de los periódicos más
respetados y prestigioso de los Estados Unidos…
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